jueves, 28 de febrero de 2013

El Síndrome de Asperger

El Síndrome de Asperger es una parte del espectro de desórdenes autísticos cuyas características son: debilitamiento en el relacionamiento social y de las dos vías de la interacción social , disminución de la comunicación verbal y no verbal, y debilitamiento en la esfera imaginativa afectando el juego, los intereses y podríamos agregar, el entendimiento con los otros.
Lo que distingue el síndrome de Asperger de otros desórdenes autísticos es una gran habilidad con el lenguaje, y más raramente, la coexistencia del desorden con incapacidad de aprendizaje y torpeza de movimientos.
Las personas con síndrome de Asperger y aquellos con Autismo comparten el mismo rango de problemas: dificultad en la comunicación de sentimientos y reacciones hacia otros aún más discapacitados , tanto como el fracaso en entender las manifestaciones no verbales de los otros usados habitualmente para apreciar los sentimientos de otras personas, su status social y aún su edad.
Los que padecen del síndrome en consecuencia, tienen los mismos problemas cognitivos de base que los que padecen Autismo, aunque pueden ser menos severos y por tanto más difíciles de observar en sus manifestaciones. La evidencia sugiere que los Asper tienen problemas en la cooperación con otros en propósitos que tengan que ver con el mantenimiento de la atención y en el aprendizaje por demostración hacia lo que las otras personas prestan atención.
A causa de que los Asper son más comunicativos e inteligentes que los restantes autistas, esta carencia de lo que denominaríamos "estructura atencional", puede ser muy obvia a través de manifestar intereses no comunes, modelos de pensamientos originales y creativos, y respuestas extrañas que son muy características de muchos de ellos. Los intereses no comunes e inusuales frecuentemente comprenden la actividad clasificatoria, que algunas veces requiere con una maximización extraordinaria.
Estas actividades, por ejemplo, la lectura de mapas, la memorización de listas de nombres, pueden estar indicando el deseo de tornar explicable el mundo, lo cual, debido al déficit de la estructura atencional compartida, pueda parecerles sin sentido e impredecible. Otra fuente de impredictibilidad descansa probablemente en la dificultad que los Aspergianos parecen tener en la comprensión de cómo los demás piensan o sienten el déficit, como se expresa corrientemente en una "Teoría de la Mente". Las características particulares del Síndrome de Asperger conducen a lugares diferentes que los del Autismo. La carencia notoria de una debilidad en el lenguaje puede ser ocasionada en un diagnóstico tardío, porque los padres o los profesionales pueden ser contrarios a reconocer un problema de desarrollo, a menos que se encuentre asociado con dificultades notorias del lenguaje. El Síndrome de Asperger puede no ser diagnosticado hasta pasados los trece años o incluso en la adultez. Otro problema lo constituye el hecho de que se ignora el número de Aspergianos. Para cada niño con educación especial con síndrome de Asperger, habrá seguramente muchos otros en los sistemas educacionales normales que no han sido diagnosticados . Estimaciones más recientes sugieren que el síndrome de Asperger es por lo menos entre dos y tres veces , pudiendo llegar hasta diez veces más común, que el autismo infantil.

No hay comentarios:

Publicar un comentario